Esta semana hemos tenido la oportunidad de disfrutar de dos sesiones de trabajo muy inspiradoras, divertidas y con un contenido de reflexión muy alto. Además, todo tiene una emoción mucho más fuerte cuando quien nos invita a realizar este taller sobre el Método Da Vinci es una compañera de la Lanzadera, Sandra Begazo, quien en su trayectoria profesional ha utilizado esta técnica para trabajar con diversos grupos culturales para la gestión desde nuevos puntos de vista de conflictos, problemas o retos a asumir.
El Método Da Vinci
Según lo que hemos aprendido, este método proporciona: el despertar de la curiosidad y la creatividad, ver un mismo asunto desde diferentes perspectivas, afinar los sentidos, aceptar lo incierto, descubrir el equilibrio, trabajar el cuerpo y la mente e ir hacia lo nuevo y desconocido. El taller fue ofrecido en dos sesiones, acompañado en ambos casos de una meditación guiada para conectar con la problemática que luego abordaríamos con la técnica aprendida.
Lo hemos pasado genial, hemos reflexionado sobre cómo nos sentimos, hemos creado y expresado nuevas perspectivas de nuestros objetivos y también, compartido el objetivo de alcanzar nuestras metas utilizando nuestros talentos naturales. Al finalizar las dinámicas, cada participante y nuestra técnica hemos tenido el resultado de dos días de instrospección y búsqueda en forma de una pintura que cada uno nos llevaremos como representación de lo trabajado en estas sesiones. Un momento más y muchas vivencias que guardamos en nuestra mochila de experiencias que estamos viviendo dentro de la Lanzadera de empleo. Gracias Sandra!!!!
