El vaivén en la Lanzadera Km0 de Retiro no cesa y la palabra empleo vuelve a estar en boga entre sus participantes. Al igual que la semana pasada, hoy despedimos a otra gran compañera, nuestra amiga Adriana Hernández. Sabíamos que era cuestión de tiempo que la arquitecto del equipo, pronto, encontraría un nuevo proyecto laboral en el que demostrar su valía. Y ha llegado ese día. ¡Felicidades, Adri! No nos cabe duda de que la creatividad, la alegría y la capacidad resolutiva que has demostrado aquí durante este tiempo las vas a aplicar con creces en tu nuevo trabajo. Gracias por contribuir a poner los cimientos de esta lanzadera con tus aptitudes y tu personalidad. ¡Mucha suerte! Sabes que ya se te echa de menos…
Sin embargo, no todo va a ser despedidas. También hay savia nueva, incorporaciones que, desde su primer día, a lo largo de esta semana, están fortaleciendo el grupo. Tanto Celia Aguado, periodista económica, como Alfonso Esteve, Ingeniero de Caminos, han empezado con paso firme, participativos y con gran ímpetu. Apenas han necesitado unas cuantas sesiones y dinámicas de grupo para demostrarnos su capacidad de adaptación y dejarnos entrever cuánto tienen que aportar. De modo que ¡bienvenidos!
TALLER PARA DESTACAR EN UNA ENTREVISTA DE TRABAJO GRUPAL
Estos últimos días de la semana nos han servido para abordar, con gran profundidad una de esa grandes cuestiones que tanto nos preocupan cuando afrontamos una dinámica de grupo para acceder a un puesto de trabajo. ¿Cuáles son las claves para destacar por encima del resto? Hemos conocido algunas de ellas, de forma práctica, gracias a la orientación de una técnico de orientación de la Oficina para el Empleo.
Las entrevistas grupales suelen tener lugar en procesos de preselección, en las que se pretende dar con el rol adecuado para desempeñar un determinado puesto. Por eso, es necesario mostrar una actitud y coherencia que vayan acordes con el cargo y no dejar que nuestras ansias de impresionar con nuestros argumentos la eclipsen. A lo largo del taller, hemos sido partícipes de una dinámica en la que la entrevistadora nos planteaba una historia de la cual debíamos sacar conclusiones. La sumisión, el liderazgo, la quinésica, las notas que se apuntan para rescatar cada detalle, la manera de intervenir o cómo posicionarse a favor o en contra de los diversos argumentos, en función de la corriente de opinión que prime en el grupo… Todo forma parte de la estrategia, la cual debe ser medida al milímetro. El entrevistador sabrá en todo momento si tu actuación se corresponde con el perfil que buscan.
Uno de los aspectos a destacar, aseguraba la técnico, fue cómo nos valoramos nosotros mismos frente al empleador. ¿Qué quiere decir esto? Pues que si tuviéramos que calificar nuestras aptitudes y actitudes del 1 al 10 y nos preguntaran lo alegres que somos, ¿nos convendría atribuirnos un 10 en caso de optar a trabajar en una funeraria?
De igual forma, descubrimos que, aunque muchos la considerábamos anacrónica, la grafología sigue estando a la orden del día en este tipo de pruebas. De manera que si se pretende escribir cualquier nimiedad en una de estas dinámicas, hay que tener en cuenta que al final ese papel pueda acabe en manos de RRHH para hacer una valoración. Sin duda, aquellos que tengan caligrafías, llamémoslas pintorescas o pobladas de tachones, deberán pensárselo dos veces antes de sacar papel y boli en una dinámica de grupo, si de verdad pretenden optar a un puesto que requiera una severa capacidad organizativa. Tomad nota de esto que os contamos… ¡pero que sea legible!