Artesanía en estado puro. Así fué el taller de sombrerería que impartió con elegancia y sencillez nuestra compañera Carmen.
Paso a paso, se va fraguado cada pieza de forma exclusiva. Todo lo que ella diseña es único y además, para ello utiliza materiales naturales de primera calidad.
Nos entusiasmó ver y entender todas las horas de trabajo que lleva cada pieza. Para elaborar cada sombrero se utilizan moldes de madera que son como pequeñas esculturas.
A lo largo de la historia ha evolucionado de diversas formas el uso del sombrero; el mayor auge de esta prenda fue en el siglo XVIII y en la actualidad se utiliza como complemento y toque de estilo.
LLevar sombrero es una cuestión de actitud y marca la diferencia.
Muchas gracias Carmen por tu creatividad y constancia. Ademas nos divertimos!!!