¡Hola!
En la sociedad en la que nos movemos donde todo va deprisa, y donde en poco tiempo tenemos que comunicar mensajes complejos, hacerlo con éxito es fundamental.
Vamos a contaros nuestra experiencia haciendo un Elevator Pitch, que es un término inglés cuya traducción es discurso en el ascensor. Nuestra Técnica Lola García nos grabó en vídeo dando un discurso breve de presentación sobre nosotros mismos.
Primero nos impartió un taller de comunicación en el que nos explicó las dos grandes categorías de comunicación: comunicación verbal (lo que decimos con palabras) y comunicación no verbal (cómo lo decimos). El contacto visual, los gestos faciales, los movimientos de brazos y manos, la postura y la distancia corporal.
¿Cuánto aporta el lenguaje no verbal? Según diversos estudios, más del 60%, por lo que debemos prestarle mucha atención a cómo es nuestra comunicación no verbal, ya que gestos inadecuados restan valor al mensaje.
Antes de grabarnos hicimos una reflexión personal sobre varias cuestiones: quiénes somos, nuestro objetivo profesional, nuestros intereses, lo que nos hace únicos, cómo somos y nuestros logros.
Fue muy interesante revisar los vídeos, porque nos sorprendió mucho que algunos de nosotros nos habíamos expresado verbalmente con mucha seguridad y al vernos en el vídeo sin sonido, nos dimos cuenta que se notaba si estábamos nerviosos, si gesticulábamos demasiado con la manos y los pies, si teníamos una postura hacia delante o muy hacia atrás. Todos estos gestos hay que tenerlos en cuenta, porque el entrevistador se fijará en nuestro lenguaje no verbal aunque nosotros no seamos conscientes.
Hay mucho trabajo por hacer para mejorar nuestra comunicación, pero ya hemos dado el primer paso para impulsar nuestros talentos.
Escribe: Inma Blázquez Quílez