“Devolver a la sociedad todo lo que la Lanzadera nos ha aportado durante este tiempo”. Este era nuestro objetivo cuando empezamos a preparar el evento solidario con Cruz Roja. Y así fue.

El pasado martes nos desplazamos hasta la sede de Cruz Roja en Oviedo para desarrollar una serie de dinámicas con un grupo de personas que, como nosotros, están trabajando sus competencias personales, y participan en el programa de inserción laboral. Estas actividades fueron algunas de las que ya habíamos puesto en práctica durante la Lanzadera, y nos habían ayudado mucho en nuestro desarrollo personal.

Así, empezamos con la dinámica del escudo, en la que cada participante del taller dibujó su escudo personal (lo que le gusta hacer, lo que es importante para él/ella…) y después lo expuso al resto de participantes.

Tras ello realizamos la dinámica del globo, en la que cada participante contaba un miedo que tuviera. En el grupo había una persona encargada de hinchar un globo con esos miedos (cada vez que alguien decía uno, se hinchaba un poco más), para al final explotar el globo y dejar marchar todos esos miedos.

La tercera actividad fue una que nos había ayudado mucho a todos nosotros. Se trata de una dinámica en la que cada participante escribe el nombre de la persona que cree que va a cumplir sus objetivos primero. La técnico escribió su opinión en un papel que guardó en una caja. Después los participantes fueron abriendo la caja para ver quién era, y todos se llevaron una gran sorpresa.

Para terminar, como en toda buena fiesta, hacía falta una piñata, en la que había caramelos y también unos mensajes cargados de positividad para irse a casa con una buena sonrisa.

Cumplimos nuestro objetivo, ya que todos los participantes pudieron conocerse un poco mejor a sí mismos y además cada uno de nosotros también se marchó con un aprendizaje, con muchas ganas de seguir buscando nuevos rumbos y de no perder nunca la ilusión. Muchas gracias a Cruz Roja por esta experiencia.