Este viernes hemos visitado la sede de la Federación de Asociaciones de Familiares y Personas con Enfermedad Mental de Galicia, situada en Santiago de Compostela.

Nos ha recibido en el centro la coordinadora de servicios y programas, Carina Fernández, que ha mostrado en todo momento una gran amabilidad e interés por el proyecto que desarrollamos desde la lanzadera.

FEAFES Galicia es una entidad sin ánimo de lucro, declarada de interés público y formada casi en su totalidad por usuarios de distintas asociaciones de atención a la salud mental y su familiares. Nace en los años 90, para canalizar y unificar las actuaciones de las distintas asociaciones locales y darles una voz común, con fuerza para interactuar eficazmente con las administraciones y agentes sociales y para luchar por la normalización de la enfermedad mental y la defensa de los derechos de las personas que componen este colectivo tan heterogéneo.

La Federación, aparte de las acciones que cada asociación puede emprender a nivel particular, desarrolla una serie de intervenciones de intensidad alta, media, o asistencia básica. Entre todas ellas, en la actualidad, están trabajando con más de 8000 personas de manera directa.

En el aspecto laboral, Carina nos contaba cómo la mayoría de puestos que se necesita cubrir surge de las asociaciones (que en la práctica son las que pueden alcanzar más eficazmente todos los rincones de nuestra geografía), toda vez que en la Federación propiamente dicha apenas trabajan unas 25 personas. También pudimos conocer los puestos, muy variados, que se suelen demandar, y comentar nuestros propios perfiles en relación con este sector profesional. La propia organización utiliza el proceso de inserción laboral para vertebrar muchas actuaciones y acercarse en muchas ocasiones a los usuarios de una forma práctica, normalizada y motivadora para ellos.

Una de las cosas que más nos gustó de FEAFES es su filosofía de trabajo y el enfoque subyacente a su actividad diaria: con una marcada orientación hacia las personas, la normalización, el respeto y la empatía que merece todo individuo, y a una comprensión carente de paternalismo de la enfermedad mental y la diversidad funcional en general, nos encontramos plenamente alineados con su filosofía y principios.

La atención hacia nuestro proyecto fue muy amable y detallada, y tuvimos la oportunidad de conocer profundamente la actividad de la organización. Por todo ello, no podemos estar más agradecidos a Carina y al resto de trabajadoras que nos atendieron. ¡Os deseamos la mejor de las suertes y esperamos poder volver a vernos pronto!