Taller de Lego Serious Play

El pasado 26 de junio el equipo de la Lanzadera de Murcia disfrutó de lo lindo jugando con las piezas de Lego gracias a la visita de Consuelo Ruiz y Marcos Moltó de la empresa Creccendo que vinieron a ofrecernos un taller de Lego Serious Play.

Para romper el hielo, Consuelo nos repartió a cada uno de nosotros una bolsa que contenía 52 piezas. Con ellas teníamos que construir lo que nos fuesen diciendo en cada juego.

El primero consistió en hacer una torre, pero no una torre cualquiera, sino con una serie de colores y con una serie de reglas. El resultado fue bastante bien, ya que ninguna de ellas se parecía a la de ningún otro compañero, aunque en realidad en eso consistía el juego, como después resalto Consuelo.

Después, nos pusimos en modo playero, ya que tuvimos que construir, nada más y nada menos que un patinete de playa. Aquí cada uno de nosotros dejó volar su imaginación, y el resultado fueron unas creaciones increibles, originales y divertidas.

A continuación, seguimos con el tema playa, pues tuvimos que realizar algo que fuese estático, que estuviera en la playa o el mar, y que fuera o bien para la infancia o bien para adultos. Muchos de los compañeros lo hicieron para los niños. Entre esas creaciones podíamos encontrar desde una original ludoteca, hasta una zona de juegos dentro del agua. Aunque también se acordaron de la gente adulta, haciendo por ejemplo, un chiringuito (no hay nada más playero que eso) o un escenario acuatico.

Seguidamente, cambiemos totalmente el chip, pues nos propusieron hacer algo que fuese aburrido y contaminante.

Pero el reto mayor aún estaba por venir. Consuelo nos invitó a que cerrasemos los ojos para así poder pensar en cómo nos veríamos en un futuro próximo, para despúes plasmarlo en las piezas.

Con nuestra idea cada uno en la mente, pudimos por fin, utilizar las piezas más grandes, de multitud de formas, colores y tamaños para crear con ellas nuestra visión de futuro. Entre las creaciones estaban, a modo de ejemplo, un hotel (con su suite, por supuesto), una residencia felina o una idea para ayudar a gente discapacitada, entre otros.

Para acabar, comentar que fue una grata experiencia para el equipo ya que aprendimos una serie de valores, conocimientos (y por que no decirlo nos dieron alguna que otra dosis de creatividad a algunos, servidor que escribe estas líneas incluido) que nos pueden servir para muchas cosas.

¡¡ Gracias Consuelo y Marcos!!

Informa: Rubén López Fernández / Imagen: Flickr