El 20 de marzo comenzábamos nuestra andadura en la Lanzadera. Al principio éramos 20 personas desconocidas entre nosotras con diferentes perfiles y necesidades. Enseguida se generó un ambiente de compañerismo, apoyo y complicidad que ha sido la clave en el desarrollo de la Lanzadera.

Nos convertimos en un equipo, que bajo el lema  ¡En busca del Arca Perdida! trabajamos para conseguir el objetivo común a todas “ENCONTRAR UN EMPLEO”.

Si nos preguntaran en este momento, qué ha significado para nosotros la Lanzadera diríamos que ha supuesto un cambio muy importante en nuestras vidas.

Hemos aprendido a conocernos como personas, a descubrir nuestras competencias, muchas veces escondidas entre capas de inseguridad, miedo e indiferencia. Ha aumentado nuestra confianza y seguridad en nosotras mismas. Descubrimos diferentes talentos que puestos en común, a través del trabajo en equipo, de la comunicación y la motivación; han sido de gran ayuda para afrontar una búsqueda proactiva de empleo.

Hemos trabajado herramientas imprescindibles para conseguir nuestro objetivo como curriculum, entrevista personal, elevator pitch, inteligencia emocional, resiliencia (gestión del fracaso y la frustración), creencias, pensamientos limitantes, networking, conocimientos en redes sociales para el empleo…

Emocionalmente hemos mejorado nuestra actitud, paciencia y autoestima.

Queremos dar las gracias a todas las personas que durante estos meses han colaborado y han aportado sus experiencias y conocimientos con nosotras:

Jaime González (Mapfre), Clara Baquero (SEPECAM), Victoria Flórez (Conecta emociones), Enrique López y Mª José Agudo (SEPECAM), Nacho Vila (Grupo Aldia), Laura Verdugo, Javier Arriola (CEOE), Miguel Ángel León, Idoya Aguilar, David Delgado, Mariola Redondo (Flexiplan), José Luis Blanco (Alcalde de Azuqueca de Henares). Y por supuesto a la Fundación Santa Maria la Real, por llevar a cabo programas como este, donde se apoya y acompaña a personas desempleadas.

Nuestro agradecimiento sobre todo para Eva, (nuestra coordinadora) que ha desarrollado su trabajo con tal pasión, entusiasmo y entrega que ha conseguido transmitirnos día a día que podemos conseguir nuestros objetivos profesionales y personales. Gracias a ella nos vamos de aquí confiadas y empoderadas, con un enfoque más claro de lo que queremos y somos.

Cuando comenzamos en la Lanzadera nuestro curriculum no mostraba quiénes éramos y nuestras expectativas de encontrar un empleo eran casi nulas. Ella nos ha ayudado a mejorar éstas y muchas más cosas. Una de las cosas más importantes que nos llevamos de ella es poder decir “la persona más importante en mi vida soy YO”.

Gracias también a todas y cada una de las compañeras, por “estar ahí”, por escuchar, por entender, por compartir, y por ayudar a llegar donde lo hemos hecho. Hemos sido, y seguiremos siendo un gran equipo, que realizará una búsqueda activa de empleo con entusiasmo, en continuo aprendizaje y manteniendo una mentalidad abierta.

La evolución y el cambio en todas nosotras ha sido muy evidente, ahora toca “volar solas”.