Hoy hemos tenido el placer de disfrutar de un taller de Risoterapia impartido por Estefanía Oya Guerola,
compañera de la Lanzadera 2 Gandia.
Para realizar la dinámica nos ha pedido que entre juego y juego no hablemos entre nosotros,
tener predisposición y dejar fuera el sentido de la vergüenza y el ridículo.
Que intentaramos durante ese ratito divertirnos.
Primero nos relajamos y empezamos a movernos libremente por la sala, prestando atención a nuestra forma de caminar y cómo movemos el cuerpo.
Luego uno por uno desarrollamos los juegos y ejercicios que nos indicaba como por ejemplo:
-
Contraer los músculos y caminar rápido e intentar decir nuestro nombre a la vez sin relajar.
-
Colocarse en círculo y coger al compañero por distintas partes (hombros, cintura, rodillas) y
mover las caderas hacia delante y hacia atrás, cambiando de sentido y por último sentarnos
en las rodillas de la persona de detrás.
-
Hablar con las personas con idiomas inventados, solo con números o con sonidos de animales.
-
Empezar a caminar por la sala, y sin que se note mucho el plumero, empezar a seguir a alguien.
-
Hacer un círculo con las sillas, pero mirando hacia fuera, relajarnos y experimentar con nuestra risa.
-
Crear una fila y con mímica adivinar los gestos (tipo teléfono loco).
-
Tirarnos al suelo y apoyarnos en la persona de detrás y practicar la risa forzada.
Los efectos de la risoterapia en el trabajo son muchos y muy beneficiosos.
Estamos muy agradecidos con el taller, ha sido una experiencia muy divertida. Esperamos repetir muy pronto.
Redacción: Gabriel Buendía.