Cuando el cambio se convierte en desarrollo

 

Como ya comentábamos la semana pasada, se ha producido un clic en cada uno de nosotros en la Lanzadera que nos sitúa en el fascinante momento en el que el cambio se convierte en desarrollo.

 

Han pasado apenas un par de meses y las presentaciones tímidas del primer día son, ahora, discursos firmes que transmiten nuestros valores y esa actitud de la que siempre hablamos, la actitud proactiva.

Hemos pasado de la idea a la acción, les hemos puesto patitas a nuestros objetivos y sabemos que perder no está dentro de nuestras posibilidades porque una vez que estamos en este punto ya solo puede darse el éxito. El aprendizaje está asegurado.