Empezamos la semana en la Lanzadera a todo color y es que nos ha visitado la experta en coaching educativo y comunicación neurolingüística Elena Argüelles. Y lo ha hecho cargada de lápices de colores y mandalas.
Nos ha mostrado como un mandala, círculo sagrado en sánscrito, puede llegar a ser una herramienta muy potente y efectiva a la hora de trabajar. Además tuvimos la suerte de que aprovechase su visita para trabajar por primera vez en mandalas grupales.
A la hora de colorear un mandala debemos trabajar de forma fluida y basar la elección de colores en lo que vamos sintiendo en cada momento. Una vez recibas un mandala, pasa a ser tuyo. Tú decides lo que haces con él: añadir líneas, secciones, dejarlo a medias, no colorear ciertas zonas,…El mandala pasará a ser un espejo de nuestro mundo interior, un representación de cómo eres, del inconsciente.
Una vez realizado el mandala de forma grupal, también tuvimos la oportunidad de trabajar individualmente. La dificultad de ese ejercicio está en la elección de colores. Y es que todas las personas tenemos preferencia por ciertos tonos, pero son los que no nos gustan los ideales para trabajar las emociones negativas.
Es tal la importancia de los colores, que Elena nos ofreció también una charla sobre la teoría del color en el valor de nuestra marca. Y es que nuestra marca debe transmitir coherencia e intención. Debemos elegir colores, imágenes y tipografías que conecten con nosotros y nosotras. Ese es el primer paso para generar credibilidad. Por ejemplo, qué ropa elegir para una entrevista de trabajo llega a ser un verdadera quebradero de cabeza. Elena nos recomienda no ir disfrazados. Debemos ir cómodos y seguros porque esa emoción será la que transmitiremos a la persona que nos entrevista.
Y por supuesto que debemos tener en cuenta el público objetivo hacia el que va dirigida nuestra marca personal y profesional. Unos colores neutros y una tipografía demasiado clásica podrían llegar con menos impacto a un público joven.
Desde la Lanzadera de empleo de Langreo le damos las gracias a Elena por su visita, por sus consejos y por descubrirnos el poder del color.