Nuestra compañera Vero nos había hablado de esta asociación y, este día 22 de noviembre, hemos tenido el privilegio de compartir una jornada con la gran familia que forma ASPRONAGA, la asociación de personas con discapacidad intelectual más antigua de Galicia.
Camino entre bellos arcoíris, llegamos a las instalaciones que la asociación tiene en Lamastelle (Oleiros). Allí nos ha recibido Marta Fernández, educadora social del centro, que nos ha organizado una amena y divertida mañana.
Primero, Marta nos ha reunido en un aula para hablarnos brevemente de la historia de ASPRONAGA, con algunas imágenes de las distintas instalaciones que la forman, vídeos explicativos de la discapacidad intelectual protagonizados por los propios usuarios y otros proyectos tan interesantes y fabulosos como el de Nós Why Not?.
Posteriormente, nos ha llevado de visita guiada por las distintas instalaciones que integran el centro laboral: centro de día y centro ocupacional, así como, cocina y sala de descanso y ocio. Allí hemos visto de primera mano cómo es la vida diaria de los chicos y los trabajadores. Los chicos nos han recibido con los brazos abiertos, como si fuera nuestra propia casa y hemos disfrutado con ellos su tiempo de descanso matutino, bailando, jugando al futbolín, conociéndonos y pasándolo muy bien.
Acabado el tiempo de descanso, hemos ido a trabajar con ellos el resto de la mañana. Nos hemos distribuido entre las distintas áreas de trabajo, nos han explicado las tareas que teníamos que realizar y cómo las teníamos que hacer: ensamblaje y retractilado de carpetas, montaje de las cajas de cartón, introducción de rollos térmicos en sus correspondientes compartimentos, correcto etiquetado del producto y paletizado final de todo el material para su almacenaje y posterior distribución. Nos hemos sentido totalmente incluidos en los equipos de trabajo que forman.
Como lanzadera de empleo que somos, queremos valorar y visibilizar el trabajo de las personas con discapacidad intelectual. Hemos visto en ellos trabajo en equipo, aprendizaje, compromiso, lucha, adaptabilidad, emoción y talento. Sí, mucho talento. Talento en las fotos de Eloy, en las alternativas que busca Ramón para hacerse entender, en las claras explicaciones de Samuel, en la memoria de Ángeles de Mesoiro para acordarse de los nombres de todos nosotros, en Juan, María, Miguel, Eva y un largo etcétera.
Desde Esforza Arteixo queremos decir que ha sido una experiencia emotiva e inolvidable, y agradecemos a ASPRONAGA que nos haya abierto sus puertas para poder vivirla.