Si hubiera que elegir uno de los días más emotivos que hemos vivido en la Lanzadera de Toledo 2018 sería el 28 de noviembre.

Ese día, cada uno de nosotros abrió su corazón compartiendo sus miedos y terrores más profundos.  Poner en común estos temores produjo en gran parte la evolución del conjunto de todos nosotros que pasamos de ser “grupo” a ser un equipo.

Ese mismo día llevamos a cabo una dinámica llamada la Caja mágica. En ella afloraron sentimientos inesperados que produjeron una renovación interior de cada uno y un cambio en nuestra manera de pensar.

Con música relajante de fondo, cada uno trajimos a nuestra mente el recuerdo de alguien querido o importante para nosotros. Muchas veces, esas personas pueden ser, hijos, parejas, hermanos, padres…y al mirar dentro de la caja mágica, cada uno debería encontrar a esa persona querida en quien estaba pensando.

La magia de la caja se obra cuando al mirar dentro de ella te sorprendes viendo tu propio reflejo. La única persona en quien realmente nadie había pensado y a quien más deberíamos apreciar.  Si uno mismo no se quiere y no está bien, no puede dar todo de sí mismo a los demás.

La persona más importante para ti mismo siempre debes ser tú.

Redacción: Verónica García Iglesias

Fotografía: Miguel Salvador