Visita Pentadis

 

Dicen que cuando entras a un lugar, el primer golpe de vista, el primer olor, es el que te queda, y te condiciona para todo lo que pueda pasar después.

 

Cuando pasas a las instalaciones de esta empresa de distribución de artículos de papelería y de material de oficina, lo primero que te llama la atención es su escalera principal. Es como la de un palacio, amplia y  de madera, y no sólo la escalera es amplia, como luego pudimos comprobar, todas las instalaciones de esta empresa son amplias, limpias y espaciosas.

 

Nos recibe Raúl Rodríguez, director general de Pentadis, de manera cálida e informal y nos invita a pasar al corazón de Pentadis: su almacén que, como no puede ser de otra manera, es enorme, limpio, ordenado y silencioso. Allí , nos explica el funcionamiento de la distribución de los artículos, que por las mañanas se dedican a las entradas de materiales y preparación de envíos, y por las tardes a los envíos de los pedidos. Que lo más importante es mimar a los clientes, ser fieles y cumplir los acuerdos.

 

Salimos del almacén, con ese olor a papel nuevo, a cartulinas, y algunos de nosotros pensando que allí, nuestros hijos  en edad escolar, habrían sido felices en cualquiera de sus pasillos ( la mía en particular, en el pasillo de las libretas).

 

Raúl nos invita a subir a su despacho, una sala grande con un gran ventanal que da al campo y por la que entra muchísima luz del sol. Estamos a gusto.

 

Nos presentamos uno a uno, y nos da consejos sobre cómo hablar en entrevistas de trabajo, las cosas que hay que decir, y las que es mejor no decir directamente, sobre el elevator pitch, lo importante que es el curriculum y que a él le gusta la proactividad, que las personas le lleven el curriculum en mano,  para conocerla de verdad, no por una foto.

 

Nos quedamos extrañados, ya que es raro encontrar en estos tiempos  a alguien que quiera coger tu curriculum, derivando siempre esta acción a los emails, o a la página web de la empresa indicada. Terminamos la visita con una foto en la escalera principal, como no podía ser de otra manera.  

 

Me quedo con la importancia que Raúl da al buen ambiente en el trabajo, a que sus trabajadores estén a gusto, a no ser simplemente un número.

Me quedo con ese primer golpe de vista, la escalera, que indica el buen hacer de esta empresa y el querer agradar a todo el que pase por allí.

 

Me quedo con ese primer olor a nuevo, a papel en blanco, donde, ojalá, podamos escribir todas las cosas buenas que nos vayan sucediendo en esta etapa que estamos viviendo, con la Lanzadera, llena de olores nuevos, sentimientos nuevos, amigos nuevos y nuevos conocidos.

 

Gracias a Raúl por su atención tan especial y por sus consejos. Ya los estamos llevando a cabo.



 

Cristina Reino