"Trabajando miedos y creencias limitantes"

Ayer después de realizar la visita concertada a una empresa en Villaviciosa y aprovechando el magnifico entorno de la playa de La Griega, Rocío, nuestra guía en esta andadura de la Lanzadera de Empleo, nos propuso a todas las participantes que escribieramos en un papel todas los miedos y creencias  limitantes que aún teníamos a la hora de buscar empleo.

Tras unos minutos de meditación frente al papel, ya tenemos todas escritas nuestras auto limitaciones, es entonces cuando nuestra tecnico nos propone un paseo por la ruta de icnitas que hay en esta playa. En cuanto comenzamos a caminar nos pidió que valoraramos las limitaciones del 1 al 10, siendo 10 el peso de la creencia más limitamte para nosotras....caminamos más o menos en silencio ordenando mentalmente lo escrito en nuestro papel.

Al inicio de la ruta de 600m nos comunica que vamos a buscar piedras que representen esos  miedos y creencias limitantes, pero no cogeremos las del camino, nos dice que al final del recorrido hay un lugar mejor para escoger nuestras piedras.

Al llegar al final, bajamos a la pedregosa playa que un día pisaron los dinosaurios y allí nos dice que saquemos las mochilas vacías que nos pidió llevar el día anterior. Entre risas sacamos las mochilas temiendonos lo peor.

Rocío levanta una tiedra y dice: - esta piedra equivale al 1 ...aquella al 2... y así hasta el 10, ahora coged las piedras de vuestra lista de pensamientos limitantes y metedlas en la mochila... después de risas e intentos de regateo con los pesos de las piedras, iniciamos el camino de vuelta, escaleras arriba intentando no perder el equilibrio con tanto peso, un trecho más adelante nos indica que tomemos una bifurcación del camino que nos lleva de nuevo a bajar a la pedregosa playa , una vez allí depositamos nuestras pesadas mochilas y nos invita a expresar cómo nos hemos sentido con todo ese peso a cuestas y a reflexionar sobre cómo pesan en nuestras vidas esos miedos y creencias limitantes y nos invita a librarnos de ellos a traves  del lanzamiento de esas piedras que hemos llevado por el camino.

Hemos reflexionado todo el camino de vuelta de la liberación que sentimos al desprendernos de esas piedas y lo aliviadas que hacíamos el resto del camino de regreso.

Confieso que me he guardado una piedrecita de esa playa, le he puesto la fecha y la llevo en mi monedero, para no olvidar jamas la gran lección que aprendimos ayer.