Los caminos del liderazgo

 

El día 24 de Enero vino a visitarnos el Concejal de Empleo, Juventud e Igualdad de Moralzarzal, Ángel Martínez para hablarnos de los caminos del liderazgo.

Cuando te hablan de liderazgo, ¿Qué os pasa por vuestra mente? ¿Qúe es para vosotros liderazgo?

Para nosotros inicialmente pensamos en personas con poder, con influencia, con status social alto… pero fue una gran sorpresa descubrir que esa idea preconcebida que tenemos todos en nuestra mente, es una “mentira”, es un “falso liderazgo”.

El verdadero liderazgo es el que se refiere a todos nosotros, todos somos nuestros propios líderes personales, familiares y de nuestra comunidad.

Para ir introduciendo esta realidad en nuestras mentes, nos habló de la Pirámide de Maslow. Todas las necesidades que vienen representadas tenemos que verlas de forma transversal y no lineal. El centrarnos en la base de la pirámide, nos lleva a olvidar partes importantes para la persona como la autoconfianza, la autorrealización… las cuales nos permiten avanzar y retarnos a nosotros mismos.

Algunas de las consecuencias de aceptar la Pirámide de forma lineal son una baja autoestima, tener unos recursos limitados, falta de creatividad, falta de aliados y estar en una situación de vulnerabilidad. Una forma muy fácil y efectiva de conocer nuestras necesidades es a través de la introspección, es decir, mirar hacia dentro, ser honestos con nosotros mismos, querernos cuando nos evaluamos, ser realistas y tener tiempo para nosotros.

Después de conocer nuestras necesidades personales, podemos enfocarlo hacia un liderazgo personal y también colectivo.

Para conseguir un liderazgo personal es necesario poner la toma de decisión en NOSOTROS MISMOS. Tener cuidado con las autolimitaciones, tener en cuenta que nuestras decisiones no son las que generan éxito, sino nuestro compromiso con la causa y intentar actuar de pequeño a grande para generar confianza.

Muchas veces nos dejamos llevar por nuestras barreras que consciente o inconscientemente nos ponemos. Debemos tener claro quiénes somos y darnos cuenta de que nuestro valor no es solo por lo que sabemos sino por lo que sentimos.

“Hay que trabajar sobre los estados de ánimo, no sobre la motivación”.

Para conseguir el liderazgo colectivo los retos son mayores. Para generar una comunidad hay que sentir pertenencia y dotar de identidad. Es necesaria una buena gestión de grupos y tener visión estratégica.

Por ello cerramos este día con una frase que no debemos olvidar:

¡El destino final es aumentar la felicidad de nuestra comunidad!