Han transcurrido unas seis semanas y ya hemos visto las primeras inserciones/reinserciones en el mercado laboral. Cuatro compañeros, tres hombres y una mujer, han encontrado empleo o iniciado estudios. Son casos reseñables: economista/titulado ADE, dependiente de comercio y arqueóloga. A uno de los economistas le contrató una empresa de la zona central de Asturias y le funcionó el contacto previo con el gerente de la misma. El otro ha comenzado un periodo de prueba en el departamento de nóminas de una prestigiosa compañía informática asturiana. El dependiente de comercio se incorporó en marcha a un ciclo formativo profesional, el de Auxiliar de Enfermería, y trabajará durante esta campaña de Navidad en una gran superficie. A la arqueóloga, tras actualizar sus redes sociales y establecer nuevos contactos, le llegó, a través de un encuentro casual por la calle, una oferta de empleo en Madrid. No se lo ha pensado dos veces y hoy estará poniendo el pie en la zona de excavación. 

Mantenemos contacto con ellos a través de mensajería al teléfono. 

Otra compañera ha dedicado estos últimos días a probar un empleo. Pero ha vuelto a nuestra Lanzadera, a nuestras sesiones matutinas. Ella está volcada al comercio y la atención al público en el sector alimentario, pero el puesto no la sedujo. El mercado es así, y como dijo aquel torero, el Guerra, "hay gente pa to".  Tras los primeros éxitos, nosotros seguimos muy ilusionados con esta búsqueda de oportunidades laborales en equipo.