Un grupo de 20 profesionales entusiastas y proactivos divisaron en el puerto de Vigo un barco de leyenda: Lanzadera de Vigo 2019. Para ello, la capitana hizo una selección de los marineros que conformarían la tripulación y que se embarcarían para conseguir un objetivo común: la búsqueda activa de empleo. La lanzadera sería su brújula y su viaje, hacia el centro del talento: 20 mapas, 20 rumbos.
A bordo del barco, definimos una serie de valores, el respeto, la flexibilidad, el compromiso, la responsabilidad y sobretodo el compañerismo, que formarían el eje central de nuestro trabajo por proyectos. Iniciamos el viaje a través del “Autoconocimiento” que más tarde nos ayudaría a potenciar nuestras habilidades y destrezas.
Atracamos en muchos puertos, y a través de didácticos talleres aprendimos que siempre es posible resurgir, mejorando día a día y trabajando para lograr los objetivos deseados. Conocimos las herramientas claves para tener mejores resultados, posicionarnos mejor en el mercado, gestionar las emociones, diferenciarnos del resto y sorprender en una entrevista.
Lanzadera nos movilizó profundamente, tanto en el plano individual como en nuestro funcionamiento como equipo. Nos ayudó a reconducirnos, no perder nuestro eje y engancharnos en el tren del empleo, comprendiendo mejor nuestra realidad.
En alta mar, nos sumergimos en las profundidades de la empleabilidad. Nos preparamos para las entrevistas y por fin llegó el momento de contactar con las empresas y demostrar lo aprendido abordando con éxito las entrevistas.
Compañeras con deseos de EMPRENDER navegaron por la ría de Vigo y se llevaron una gran experiencia llena de entusiasmo, nuevos conocimientos y un reto: impulsar sus capacidades emprendedoras y poner en marcha sus proyectos.
Nuestra capitana apostó por nosotros y nos inyectó toda la energía de sus valores y conocimientos. Ha sido clave en nuestra evolución, desarrollo y transformación siempre respetando nuestra autonomía.
Finalmente, el balance ha sido positivo porque han desembarcado 17 marineros a buen puerto al cambiar su situación laboral. De ellos, 10 encontraron trabajo por cuenta ajena, 3 han apostado por la formación oficial, 2 reorientaron sus profesiones mediante la formación con compromiso de inserción laboral y 2 iniciaron sus proyectos emprendedores.
Todos “sin excepción” seguiremos navegando en el mundo laboral, pero gracias al programa de Lanzaderas será con mayor confianza y autoestima. Ahora tenemos las herramientas para desarrollarnos como profesionales y ser más visibles. Finalizamos con un equipo reforzado, abierto a grandes proyectos y con grandes opciones. Ha sido una experiencia maravillosa que cambiará nuestras vidas y cumplirá nuestros sueños…