Evento voluntario: Cruz Roja

Hemos  tenido el enorme placer de participar en un proyecto conjunto de empleabilidad y solidaridad con la Cruz Roja bajo el marco del programa Poises. Dieciocho miembros del programa acompañados por dos responsables, Ana y Elisa, acudieron a la sede de la Lanzadera de Empleo de Gijón en el edificio Las Palmeras donde compartimos una grata mañana cargada de emociones, risas, nuevas perspectivas y debates.

Javier, nuestro coordinador y coach ocupó la primera parte con una presentación sobre empleabilidad donde las entrevistas de trabajo protagonizaron el grueso de la misma. “No solo hay que ser un buen profesional, hay que parecerlo”. Javier nos mostró muchas de las pistas a seguir y las claves a tener en cuenta para que el proceso de selección sea un éxito. Una por una profundizó en las mismas con ejemplos de su experiencia y trayectoria profesional desde una doble perspectiva: como seleccionador y como demandante de empleo, lo que hizo  la presentación más amena y enriquecedora, además de práctica.

A continuación, realizamos una dinámica de grupo para trabajar las preguntas más conflictivas y dificultosas de abordar y contestar en las entrevistas de trabajo y que cada vez más cobran singular relevancia dentro de los procesos de selección. Para ello, dividimos a nuestros invitados en dos grupos, acompañando nosotros mismos de igual forma a dichos equipos. El funcionamiento es el siguiente: cada grupo se pone de acuerdo para lanzar una pregunta comprometida, elegida dentro de una lista facilitada por escrito a cada uno de los asistentes, al otro grupo; luego, todos los integrantes del grupo debaten sobre sus experiencias y la mejor respuesta posible a ese tipo de pregunta. En ese momento entran en juego muchos factores puesto que nuestro papel, que aunque no excedía la mera mediación y orientación cuando fuese necesaria, consistía en observar los roles asumidos por ellos y apoyarles y explicarles cuando fuese necesario la razón de ser de la pregunta en cuestión y cómo abordarla o sortearla de la forma más eficaz posible.
La hora y media de dinámica fue intensa y  provechosa para todos, destacando la intensa participación y reflexión por parte de los participantes, además del buen ambiente y ganas de todos los allí reunidos.

La tercera parte de la mañana se reservó para otra dinámica de expresión corporal a cargo de nuestra compañera Verónica quien, como estudiante de Artes Escénicas, es una auténtica experta en la materia.
Partiendo de lo esencial que resulta el control y el trabajo de nuestra comunicación no verbal, suponiendo más del 50% de la información que recibimos del emisor, y que la misma se encuentra en nuestro día a día en todas las relaciones y ámbitos en los que nos movemos, debemos detenernos y emplear tiempo en conocer nuestro cuerpo. Quiérete y mírate en el espejo; ensaya, aprende de los errores y gana seguridad.
¡Utiliza tu lenguaje no verbal para reforzar, enfatizar y apoyar lo que decimos a través de las palabras! Y no te olvides de sonreír, pues ya sabes que su interpretación es universal.
Después de un pequeño barniz con consejos que debemos cuidar para lograr que el lenguaje no verbal sea nuestra marca diferenciadora y que no se vuelva en nuestra contra, Verónica finalizó con la dinámica antes mencionada en la que hubo tiempo para crear, para inventar, para soñar, para bailar, para unirnos más, para creer,para ser... un poquito más nosotros mismos.


 
Gracias compañeros, de Cruz Roja y de la Lanzadera de Gijón, un guiño a la solidaridad y al trabajo en equipo, siempre presentes en los valores de las Lanzaderas de Empleo.
 
Este tipo de encuentros en el que todos los compañeros de la Lanzadera podemos aportar y ayudar transmitiendo todo lo aprendido en estos cinco meses de andadura es enormemente gratificante y enriquecedor para todas las partes implicadas,y cada uno de nosotros se lleva una maleta cargada de energía y agradecimiento hacia el grupo.