Mi pasión por el trabajo social no fue una elección profesional, sino un modo de vida. La mayor de mis inquietudes es poder desarrollar mis competencias por el bienestar de las personas, para influir positivamente en sus vidas. Para mi no existe mayor satisfacción que la de saber que todos y cada uno de nosotros tenemos el poder de cambiar nuestras vidas y la de los demás.
“Nuestra recompensa se encuentra en el esfuerzo y no en el resultado, un esfuerzo total es una victoria completa”.