Mi nombre es Laura, tengo 27 años y soy de Mérida.
Uno de los episodios clave en la vida de toda persona es aquel en el que tienes que hacer una parada en el camino y detenerte a pensar en cuál es la profesión de futuro que deseas para ti. Muchos  incluso sufren lo que se denomina “el bloqueo del escritor” al no saber cuál es la dirección a tomar.
Ese, sin embargo no fue mi caso, pues el lugar donde nací tuvo bastante que ver a la hora de elegir mi  profesión, la cual, más que un trabajo es una vocación para mí.  Además, me define bastante bien pues, como mi ciudad, soy un alma vieja en un cuerpo de eterna adolescente; esto es, no me quedo anclada en el pasado sino que estoy en continuo estado de desarrollo y evolución.
Puedo decir sin temor o vergüenza que las piedras me hablan. Mismas piedras en las que, gracias a mi capacidad de trascendencia, soy capaz de descubrir, traducir, enseñar, transmitir y desentrañar el mensaje que se oculta inscrito en ellas.  
Pero es más, dado que mi trayectoria investigadora ha girado en torno a las diversas religiones en la antigüedad en el entorno emeritense,  Ataecina, Marte, Mitra e incluso Santa Eulalia son ya casi más como amigos míos, que personajes secundarios de lujo en mi vida.

También me gusta jugar con las palabras. Pero sobre todo  tratar con las personas.
Pienso que cada persona y cada cultura tienen una historia que estoy ansiosa por aprender y escuchar. Quizás sea ese el motivo por el cual me considero una persona culturalmente activa: conozco en profundidad la británica y la italiana; cuyos idiomas manejo con fluidez. Y en menor grado la portuguesa y la alemana. 

Nombres y fechas.
Densa, árida y aburrida son palabras habituales que se utilizan para describir mi profesión cuando se convierte en una asignatura con multitud de contenidos a estudiar.
Mi objetivo principal es desechar los prejuicios existentes para con ella y hacer ver que, al igual que sucede conmigo, ambas estamos llenas de matices interesantes.

Me llamo Laura y esta es mi historia.
¡Guárdate de una historiadora que te sepa contar historias!